Sarmiento y Racing igualaron 1 a 1 en Junín por la fecha 9 de la Copa de la Liga con goles de Guido Mainero y Balthasar Rodríguez. Con más argumentos en el complemento tras una opaca y deslucida actuación en el comienzo, el equipo de la dupla rescató un punto cuando todo parecía desolación. Adeuda fútbol este equipo que está afuera de las competencias internacionales de 2024 a la espera de que Víctor Blanco se decida a traer un entrenador. Mientras tanto, vamos viendo.
Los partidos que juegan Racing tienen un formato muy parecido. Durante todo el ciclo de Fernando Gago y este interinato con extensión indefinida de Grazzini y Videla, los rivales le dan campo y pelota a la Academia. El sentido de esta ofrenda es atacar los espacios que deja el equipo a espaldas de su última línea o capturar alguna pérdida en zona baja para lanzar una salida rápida de contra. Todos toman nota de esto pero el estilo que entrenadores y futbolistas prefieren no se altera.
Desde que comenzó el partido Sarmiento hizo esto que advertimos, replegando líneas cerca de Devecchi, dejando que Racing maneje la pelota con los centrales y sostener el orden hasta encontrar una ventana de escape. Para colmo el manejo de pelota del equipo que dirige la dupla es espeso, sin aceleración y con tanto anuncio que sólo hay que mantener la aplicación táctica para aguardar una oportunidad.
Antes de la expulsión de Ojeda a los 30 minutos del primer tiempo, y luego de ella, Sarmiento tuvo dos opciones claras de gol con esa ejecución del plan antes descripta. Un ingreso de Marinelli por derecha que tenía a Fontana por dentro para definir pero prefirió su remate. Y luego el gol de Mainero, previa asistencia de Fontana, que ingresó a espaldas de Colombo. Goles repetidos, ataques similares de los rivales y nula corrección de defectos por parte de Racing.
Con la pelota en los pies el equipo fue insulso. Posesiones largas, con movimientos anunciados y girar la pelota de lado a lado sin romper líneas. Las pocas apariciones de Quintero son el único momento de lucidez pero se pierden en resoluciones fallidas. Apenas dos remates de Almendra por encima del horizontal y uno de Moreno desviado suenan a poco. Sarmiento estuvo cómodo con 11 y 10 futbolistas en este primer tiempo.
El segundo tiempo profundizó las posturas de uno y otro. Sarmiento con diez futbolistas se replegó más cerca de Devecchi y ya no intentó siquiera alguna contra. Racing puso sus marcadores centrales en campo rival, colocó gente adentro del área pero no pudo encontrar caminos al arco local con claridad. Un par de ingresos de Hauche por derecha que no encontraron destino de gol y nada más.
La realidad es que Racing generó peligro sólo con remates de media distancia. Sarmiento juntó a sus nueve futbolistas de campo dentro de su área y dejó que el equipo de la dupla tuviera que mover la pelota de un lado a otro. Así era de media distancia el único camino viable para llegar hasta el gol. Remataron Piovi, Gómez y Quintero entre otros, pero fue Balthasar Rodríguez a los 47 el que estampó la igualdad.
Racing, sus futbolistas, Blanco y Capria en realidad, no asumen aún la salida de Gago. Juega igual, con los mismos defectos que lo estacionaron en una zona inestable. Afuera de los puestos de cuartos de final en esta copa doméstica y también excluido de las copas internacionales de 2024. Si nos guiamos por las palabras del asesor deportivo, no hay de qué preocuparse. Hace 20 días el club no tiene entrenador y el Presidente ha decidido ir partido a partido. En Racing está todo bien, somos demasiado exigentes.
Paolo Cella
@EspeRacinguista
@Paolo_Cella
Se pospuso, para el viernes, la reunión que estaba pactada con Gustavo Alfaro. La dirigencia especula con el resultado del partido ante Sarmiento.