Durante la jornada de ayer, el Tribunal de disciplina de la Asociación del Fútbol Argentino desestimó el pedido de Independiente para volver a jugar el clásico de Avellaneda. La institución presidida por Hugo Moyano había elevado el reclamo, luego de haberse sentido perjudicada por el penal cobrado por Mauro Vigliano que le posibilitó a Racing ganar el partido sobre el epílogo del mismo.
De esta manera, queda ratificada la victoria de la Academia obtenida dentro del campo de juego, situación que nunca debió haberse puesto en duda. Igualmente, el “Rojo” tendría cinco días para ampliar el pedido e intentar cambiar la decisión obtenida anoche.
Por Ariel Gutierrez
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